Everyday Stewardship

How Much Is Enough?

During a conversation about good stewardship of money and time, my daughter shared that sometimes doing the best thing was so hard for her to do. It wasn’t always a matter of right and wrong, black and white, but a matter of better and best. I began to reflect on the truth of her statement. When confronted with a decision, we can sometimes be given a choice of good, better, and best. We fool ourselves into believing that the good choice is not a bad one, so it must be enough. However, we have essentially placed a limit on our generosity or commitment with our false sense of good stewardship.

Jesus calls us in different ways every day. Sometimes the cost to us is clear. Yet sometimes there is no clear metric. When called to love, how much love is enough? When someone needs our time, how many hours is enough? When a small gift will bring about a positive outcome, what could a larger gift accomplish?

Don’t be fooled by Jesus’ teaching of the mustard seed. He was speaking to those who were caught up in concerns of status, uncertainty of heart, and lack of true faith. Jesus taught with parables and then demonstrated true faith and generosity by his crucifixion. Perhaps the mustard seed of faith allows us to move mountains and trees so that we may see through to the horizon of the cross. In the cross, we find the real metric of love and generosity that is for all who follow Him.

— Tracy Earl Welliver

©LPi

LA ORRESPONSABILIDAD DIARIA

¿Cuánto es Suficiente?

Durante una conversación sobre la buena administración del dinero y el tiempo, mi hija compartió que a veces hacer lo mejor era muy difícil para ella. No siempre era una cuestión de lo correcto y lo incorrecto, blanco y negro, sino de lo que es mejor y lo que es aun mejor. Comencé a reflexionar sobre la verdad de su declaración. Cuando nos enfrentamos a una decisión, a veces se nos puede dar la opción de lo bueno, lo mejor, y lo aun mejor. Nos engañamos a nosotros mismos creyendo que elegir lo bueno no es una mala elección, por lo que debe ser suficiente. Sin embargo, esencialmente hemos puesto un límite a nuestra generosidad o compromiso con nuestro falso sentido de buena administración.

Jesús nos llama de diferentes maneras todos los días. A veces el costo para nosotros es claro. Sin embargo, a veces no hay una métrica clara. Cuando somos llamados a amar, ¿cuánto amor es suficiente? Cuando alguien necesita nuestro tiempo, ¿cuántas horas son suficientes? Cuando un regalo pequeño produce un resultado positivo, ¿qué podría lograr un regalo más grande?

No te dejes engañar por la enseñanza de Jesús sobre la semilla de mostaza. Él estaba hablando a aquellos que estaban atrapados en preocupaciones de su estatus, incertidumbre de corazón y falta de fe verdadera. Jesús enseñó con parábolas y luego demostró verdadera fe y generosidad con su crucifixión. Quizás la fe de semilla de mostaza nos permita mover montañas y árboles para que podamos ver hasta el horizonte de la cruz. En la cruz, encontramos la verdadera métrica de amor y generosidad que es para todos los que lo siguen a Él.

— Tracy Earl Welliver

©LPi